Me veo en la obligación de realizar esta entrada para desmentir uno de los bulos más grandes y extendidos de la Historia de España o Península Ibérica en las últimas décadas —que conste esto último— por los de siempre; medios de (des)información manipulados por quienes ya sabemos y sobre todo y aún más difundido por aquellos a quienes interesa desarmar un Estado y una Unidad Nacional forjados hace más de un milenio, primero como entidad territorial con Leovigildo, y después como unidad religiosa católica con la conversión de Recaredo. Pero sobre todo le es jugoso a estos parásitos el destruir la identidad de un pueblo, de una raza, de una historia, forjada a base de guerras y numerosos derramamientos de sangre.
Sin más preámbulos y sin enrollarme mucho más con este tipo de temas, voy a proceder, a desmentir, con una sola imagen y muy poquito texto, el que, a mi juicio, me parece, después del Holocausto y 2 o 3 timos más, la MAYOR mentira del último cuarto del siglo XX —puesto que antes este bulo no se había ni difundido, ni los españoles tenían la menor conciencia de que algo así pudiese ser verdad; sino que más bien empezó de mano de un retrasado mental que bien pudiera llamarse Américo Castro, que fue el que ideó también la "España de las tres culturas que vivían pacíficamente".
Aquí está el mapa genético [1] de el Planeta Tierra (así podréis comparar semejanzas y diferencias con naciones o continentes más bien del que pretenden distanciar a España para que ésta pase a formar parte de el Magreb):
Bien, como podéis observar, en España, el halogrupo que predomina es el R1b, es decir, sangre "nordico-roja", como la llamaría NT, o bien directamente sangre "paleo-europea" (esto es, de los pobladores primitivos de la Península). La sangre "mora", o como la queráis llamar, brilla más bien por su escasez y por haber aparecido en los últimos siglos con la traída de esclavos a la Península, y no con la invasión mahometana. Aparece en color azul claro, representando al haplogrupo E3b, muy común en el Magreb.
Podemos apreciar también cierta cantidad del haplogrupo J, casi con toda seguridad arménido/dinárico y neolítico; está muy presente en zonas del Cáucaso pero sobre todo abunda entre los semitas (árabes, judíos, etc.), lo que NO quiere decir en modo alguno que éste sea un haplohgrupo exclusivamente semita o que la dinarización signifique "semitización", no.
Si miramos, ya con lupa, podremos darnos cuenta de que hay cierta cantidad del haplogrupo R1a, que abunda en las naciones eslavas como la Rusia "europea", Ucrania, Bielorrusia, etc. (Probablemente esta sangre fue traída por los esclavos de origen eslavo que poseían los musulmanes durante la etapa de al-Andalus, y también por las mujeres de los harenes de los califas de origen eslavo).
En una porción mayor a la de los haplogrupos E3b y J juntos, tenemos a la sangre al haplogrupo I. Este haplogrupo era común en el ADN de los vikingos, y sigue abundando en la Península Escandinava.
Bien pues, espero haber desmentido —al menos un poco— este mito creado por los que quieren nuestra completa destrucción y desintegración; y cuando os digan que "en Andalucía todos son moros porque tardaron más en expulsarlos" es otra falacia, porque sí, se tardó más años en expulsarlos de aquí, pero se hizo una limpieza de sangre sin precedentes y pocos se convirtieron al Cristianismo para poder mantenerse aquí viviendo.
(AVISO LEGAL: NI EN ESTA NI EN NINGUNA DE MIS ENTRADAS SE PRETENDE ENALTECER NI HACER APOLOGÍA A LA DISCRIMINACIÓN RACIAL NI AL ODIO A LO DIFERENTE, SIMPLEMENTE A DIFERENCIAR ENTRE UNA COSA Y OTRA Y ESCLARECER LA VERDAD, GRACIAS A TODOS LOS LECTORES).
NOTAS:
[1] El mapa genético aquí expuesto es el del ADN del cromosoma Y (Y-DNA), esto es, los linajes genéticos paternos. Para ver el mapa de los linajes maternos, es decir, del ADN del cromosoma X (mtDNA por su abreviación en inglés o ADN mitocondrial) ver aquí.